Por qué soñar
Un ataque de rebeldía, toda la infancia al traste, no acabó sus estudios en el Instituto Martínez Uribarri, cogió todos sus bártulos y se
marchó.
El camino era largo, no sabía lo que aquello le deparaba,
soñaba con largos amaneceres, paseos por la playa, y noches bajo las estrellas
junto a una linda mujer, “como todos los cuentos, todas las mujeres y hombres
supongo”.¡ Pero los sueños no son fáciles ni milagrosos!.
Ya no era tan niño y la obligación le ahogaba, lejos de su
tierra se sentía desprotegido y solo, la presión de su pecho comenzó a aumentar
día tras día pero su esperanza de conseguir su sueño seguía viva, algún día con
su esfuerzo lo conseguiría, “seré feliz y con todo lo que es sacrificado el
tiempo me dará mi recompensa”
Trazos de color empezaban a iluminar su camino, y al fin y
al cabo, siempre se vuelve al lugar de donde se partió. Porque nunca se sabe
que se tiene hasta que se pierde, o se deja escapar. Siempre hay
que mantener los sueños.
Por: Trinity
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